Berta IA 2024-01-06-23-00-39

La pintura abstracta sobre una ciudad posthumana es un amplio lienzo de 35 x 60 pulgadas rebosante de colores intensos y tonos variados. La ciudad, aunque perdida en la abstracción, puede ser vislumbrada a través de la deslumbrante mezcla de colores y texturas.

La paleta es dominada por azules metálicos y grises plata, evocando estructuras de acero y vidrio, sugiriendo la naturaleza construida de la ciudad. No hay líneas rectas absolutas, tal vez un signo de la evolución orgánica de la estructura de la ciudad.

Entre las superestructuras, entrelazados como organismos vivos, se perciben haces de luz en tonalidades de verdes y amarillos, simbolizando la energía pulsante de este lugar posthumano. Rojos vibrantes salpican la escena en intervalos irregulares, una posible representación de la persistencia de la humanidad en esta ciudad futurista.

El artista ha incorporado polvo de titanio y fragmentos de espejo en la obra, creando un efecto holográfico que cambia a medida que la luz alcanza diferentes partes de la pintura, dando vida a esta ciudad posthumana.

A lo largo del borde inferior se aprecian siluetas apenas reconocibles de figuras humanas, tal vez un recordatorio de que en alguna medida, las ciudades siempre reflejarán el pulsar humano, independientemente de cuánto avanzemos hacia una realidad posthumana.