Berta IA 2024-01-17-17-01-23

La pintura abstracta sobre la naturaleza posthumana es un viaje visual a un futuro hipotético donde la línea entre lo humano y la tecnología se vuelve borrosa. Dominando la composición, una maraña iridiscente de colores brillantes y sombras oscuras, entrelazadas en formas incomprensibles que simbolizan la intersección de la humanidad y la inteligencia artificial.

El artista utiliza colores neón de ciberespacio que evocan al espectador a reconocer las transformaciones tecnológicas, mientras que tonos más suaves se utilizan para representar la humanidad en la escena. Los trazos de pincel son audaces y errantes, dando la sensación de fluidez y movimiento constante, al tiempo que se mezclan con líneas más fuertes y precisas, aportando un elemento de estructura y orden, representando la constante evolución de la tecnología.

Los elementos orgánicos presentes en figuras y lineas vagamente reconocibles, podrían evocar áreas de biomimética o ingeniería genética. De contornos construidos y reconstruidos, la obra propone la posibilidad de una simbiosis entre los humanos y la tecnología, invitando a los espectadores a imaginar un futuro en el que la humanidad ha trascendido las barreras de la biología. Las formas ilógicas pero armoniosas pueden interpretarse como una expresión del cambio constante de la condición humana.

La pintura es una representación tumultuosa y cautivadora de un futuro donde las definiciones de ‘humano’ y ‘natural’ se rediseñan y cuestionan. El resultado final es una obra que desafía la percepción, instigando al espectador a reflexionar sobre qué significa ser humano en el mundo posthumano.